Cuando alguien te habla de energía nuclear, es probable que lo primero que se te venga a la cabeza sean esas imágenes de reactores gigantes, barras de uranio fluorescente o desastres famosos como el de Chernóbil o Fukushima. Sin embargo, la energía nuclear, especialmente aquella que se obtiene por fisión, va mucho más allá. Su gran potencia y su enorme estabilidad como fuente constante, algo muy requerido a día de hoy, ha hecho que en muchos países se estabilice como una de las piezas clave en el futuro energético del planeta.
¿Quieres entender cómo funciona exactamente este tipo de generación energética y por qué todo el mundo está hablando de ella? Te lo explicamos en 5 puntos clave, sencillos y de forma clara.
1- ¿QUÉ ES EXACTAMENTE LA FISIÓN NUCLEAR?
La fisión nuclear es un proceso en el que el núcleo de un átomo pesado, como por ejemplo el del uranio-235, se divide en dos núcleos más pequeños tras recibir el impacto de un neutrón. Es una división que genera una gran cantidad de energía en forma calor, además de nuevos neutrones, los cuales pueden usarse para seguir impactando y dividiendo otros núcleos, generando una reacción en cadena controlada.
Pero lo más increíble de todo es la enorme cantidad de energía que se obtiene: por cada átomo dividido, se libera muchísimo más calor que una reacción química convencional, como aquellas que se producen con la quema de gas o carbón. Es decir, con una cantidad muy pequeña de material, se puede generar una cantidad gigante de electricidad: justo ahí está la clave de por qué la energía nuclear es tan potente y eficiente en comparación a otras.
2- ¿CÓMO FUNCIONA UNA CENTRAL NUCLEAR?
El funcionamiento de una central es mucho más sencillo de lo que parece: dentro del reactor nuclear, el calor generado al dividir los átomos calienta agua, la cual se convierte en vapor. Y así de sencillo, el calor mueve unas turbinas conectadas a generadores, que transforman esa energía mecánica en energía eléctrica.
Miguel Candela / SOPA Images/Sipa USA / Cordon Press
Central nuclear de Trillo
Y, por supuesto, se trata de un proceso que se realiza en situaciones controladas. Las barras de combustible se encuentran rodeadas de elementos que regulan la intensidad de la reacción, y todo está contenido dentro de varias capas de seguridad. De esta forma, aunque es cierto que el interior del reactor es un entorno altamente energético, el diseño de la central está pensado para que la reacción ocurra de manera estable, predecible y sin ningún tipo de descontrol.
3- ¿POR QUÉ ES UNA FUENTE TAN POTENTE Y EFICIENTE?
Como acabamos de comentar, una de las mayores ventajas de la energía nuclear es su alta eficiencia. De hecho, esta es tal que, con apenas unos kilos de uranio, una planta es capaz de generar tanta electricidad como miles de toneladas de carbón. Es decir, menos uso de recursos, menos transporte y menos residuos sólidos. Además, no se emiten gases de efecto invernadero durante su funcionamiento, lo que la convierte en una opción mucho “más limpia” que los combustibles fósiles.
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Esquema que representa la fisión nuclear del uranio
Otro de sus mayores beneficios es la continuidad: una central nuclear puede generar electricidad de manera continua durante más de un año sin necesidad de recargar combustible. Esto le permite tener una gran ventaja sobre otras, ya que puede producir grandes cantidades de energía durante periodos muy largos, manteniéndose completamente independiente del clima o de otros factores externos.
4- ¿POR QUÉ GENERA TANTO DEBATE?
Ahora bien, a pesar de todo ello, la energía nuclear sigue dividiendo opiniones: junto con sus beneficios, trae consigo algunos riesgos que no pueden ser ignorados. Aunque es cierto que los accidentes graves son muy raros y son evitables si se respetan las medidas de seguridad y las revisiones periódicas, cuando ocurren pueden traer consecuencias importantes para la salud y para el medio ambiente.
Además, otro punto delicado es el de los residuos radiactivos. Aunque se producen en poca cantidad, estos materiales pueden seguir siendo peligrosos durante miles de años. ¿Y cómo almacenarlos todo ese tiempo de forma segura? La pregunta todavía está en el aire y, a ella se suma el temor de que los conocimientos y materiales sean usados para fines militares. Por ello, aunque tiene grandes ventajas, la energía nuclear también requiere de mucha responsabilidad, transparencia y estricta regulación.
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Central nuclear de Dukovany, República Checa.
5- ¿POR QUÉ ESTÁ EN EL PUNTO DE MIRA?
Si la energía nuclear se ha puesto últimamente en boca de todos es debido a su estabilidad. A diferencia de las fuentes renovables, como son la solar o la eólica, que dependen del clima, la fisión nuclear puede producir electricidad de forma constante las 24 horas del día, los 7 días de la semana. ¿Qué significa esto exactamente? Que una central puede seguir funcionando durante meses sin interrupción, lo que ayuda a mantener un suministro eléctrico seguro y predecible.
Se trata de una capacidad de generar energía de forma continua que hace que la nuclear sea valiosa a la hora de equilibrar la red eléctrica. En cualquier sistema energético, la demanda de electricidad sube y baja a lo largo del día. Pues bien, las centrales nucleares aportan una “base firme”, asegurando que siempre haya un flujo mínimo, incluso cuando no hay viento o cuando cae la noche.
Es por eso mismo que se ha hablado de ella como una energía de base: siempre está ahí, funcionando como el “motor silencioso” del sistema.