Aunque parezca muy alegre, este elefante marino del sur (Mirounga leonina) fue fotografiado en plena huida. La simpática expresión que vemos en su rostro no es otra cosa que una reacción ante una situación tensa: el intento de escapar de un enfrentamiento con un macho dominante. Y es que, en el mundo de estos gigantes marinos, las peleas por el territorio y las hembras son cosa seria, y a menudo terminan con heridas incluso para el vencedor.
La imagen fue tomada en la Península Valdés, al noreste de la Patagonia argentina, uno de los pocos lugares del planeta donde se puede observar a esta especie en libertad. De hecho, se trata de la única colonia reproductiva conocida de elefantes marinos del sur en la región, con más de 20.000 ejemplares. Este ecosistema costero no solo es Patrimonio de la Humanidad, sino también una de las joyas naturales más valiosas de Argentina. A veces, incluso la naturaleza más salvaje tiene momentos cómicos dignos de premio.