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Kenia reubica a más de 50 elefantes para evitar conflictos con humanos

El aumento de la población de elefantes en la Reserva Nacional de Mwae ha provocado tensión entre animales y humanos: este es el plan de Kenia para reducir los encuentros conflictivos.

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Kenya Wildlife Service

El Servicio de Vida Silvestre de Kenia ha diseñado una estrategia para reubicar a los elefantes desde la Reserva Nacional de Mwea hasta el Parque Nacional de Aberdare.

Kenia experimentó hace unas décadas un dramático descenso de la población de elefantes a causa, principalmente, de la demanda de marfil por parte de cazadores furtivos. Sin embargo, esfuerzos recientes en términos de conservación han hecho que el número de ejemplares se dispare, provocando incluso la sobrepoblación de esta especie en algunas áreas del país.

Ejemplo de este fenómeno es la Reserva Nacional de Mwea, la cual en su último registro censó 156 elefantes: una noticia que parece positiva, pero tras la cual se esconden efectos negativos tanto para estos animales como para las comunidades humanas con las que conviven. Y es que la cifra representa más de tres veces la capacidad total de la reserva. 

Con esto, las serias reclamaciones por parte de los locales han obligado al Servicio de Vida Silvestre de Kenia a coordinar un traslado masivo desde el ecosistema de Mwea hasta el Parque Nacional de Aberdare, ubicado a unos 130 kilómetros al norte de Nairobi. Todo ello, para reducir el conflicto entre animales y humanos y, de esta forma, gestionar adecuadamente la creciente población de elefantes.

 

La conflictiva convivencia entre humanos y elefantes

En muchas regiones de Kenia, las comunidades locales se enfrentan día a día a la incertidumbre de la naturaleza, tanto como los animales aprenden a vivir con la amenaza constante de la presencia humana.

La convivencia no es sencilla, y de ello dan cuenta los datos: según el Fondo Internacional para el Bienestar Animal (IFAW, por sus siglas en inglés), en el país se sacrifica aproximadamente a 120 elefantes al año debido a conflictos con los humanos.

 

Kenya Wildlife Service
Kenya Wildlife Service

Elefantes reubicados en el Parque Nacional de Aberdare.

La situación es todavía peor si le añadimos el factor de la superpoblación: tras el incremento del número de ejemplares en la Reserva Nacional de Mwea, los grupos humanos comenzaron a denunciar daños en sus cultivos, en sus propiedades y en las infraestructuras, la mayor parte de ellos provocados por elefantes. 

Así pues, con el objetivo de abordar el problema de la forma más justa posible para ambas partes —humanos y elefantes—, el Servicio de Vida Silvestre de Kenia ha autorizado el traslado de más de 50 ejemplares al Parque Nacional de Aberdare, una acción que ya se ha puesto en marcha.

Las estrategias de África para enfrentar la sobrepoblación de elefantes

La noticia nos recuerda una medida tomada en Namibia en septiembre de 2024: con casi la mitad de su población humana afrontando niveles críticos de inseguridad alimentaria a causa de una devastadora sequía, el gobierno anunció un controvertido plan que consistía en sacrificar 700 animales salvajes -entre ellos, 83 elefantes- y distribuir su carne entre las personas que más lo necesitaban.

El gobierno justificó su estrategia, más tarde implementada también por Zimbabue, con el argumento de reducir la competencia entre humanos y animales en busca de recursos hídricos y alimenticios. Y es que sí es cierto que existe un deterioro del medioambiente cuando un gran número de animales vive en un ecosistema pequeño. 

En el caso de la Reserva Nacional de Mwae, sus 42 kilómetros cuadrados han colapsado con el reciente incremento de la población de elefantes, pero Kenia ha encontrado una solución a priori positiva para garantizar el bienestar de la especie: ahora, decenas de ejemplares ya se encuentran en su nuevo hogar.