Los perros de terapia llevan mucho tiempo siendo coprotagonistas de historias de superación en el ámbito médico, ya que se ha demostrado que tienen un efecto muy positivo sobre la salud mental. Recientemente, uno de estos perros se ha hecho viral en las redes sociales por su papel en otro ámbito muy de actualidad en estos momentos: el deporte; y, más concretamente, los Juegos Olímpicos.

Beacon es un golden retriever de cuatro años que se ha hecho famoso por su papel como apoyo emocional para el equipo de gimnasia de Estados Unidos. En estos juegos se ha querido poner más énfasis que nunca en la salud mental después de que, en la edición de 2020, la gimnasta estadounidense Simone Biles anunciase su retirada durante la final por equipos debido a los problemas de esta índole.

Beacon nació en febrero de 2020 en Michigan y fue adoptado por Tracey Callahan Molnar, ex entrenadora de gimnasia rítmica. Molnar había tenido anteriormente un perro entrenado para terapia, Tulsa, que murió en 2019. “Después de perder a Tulsa, además de extrañarle, realmente echaba de menos la terapia con mascotas", dijo Molnar. “Soy una gran defensora del voluntariado, y lo he hecho durante muchos años de diferentes maneras y es algo que espero seguir haciendo”.

Cuando Molnar adoptó a Beacon, esperaba que él también disfrutara de ser un perro de terapia, ya que es algo que el animal debe disfrutar para poder hacer: no se les puede obligar si no están hechos para ello. Y afortunadamente fue así, según dice: “Le gustan mucho los perros, pero ama a las personas. Creo que es muy bueno para detectar el estrés en las personas. Lo hace conmigo y le he visto hacerlo con otras personas. Yo diría que realmente estaba hecho para esto”.

Su oportunidad llegó gracias a Caroline Hunt, vicepresidenta del programa de gimnasia rítmica de USA Gymnastics, quien conoce desde pequeña a Molnar. Hunt es ex atleta profesional y había estado pensando en introducir un programa de terapia con mascotas en su departamento, inspirándose en un evento al que asistió hace unos años. Así, en febrero de 2023 empezó al programa de terapia con perros para el equipo de gimnasia.

Al principio fue una iniciativa puntual, pero mucha gente apreció la iniciativa y preguntó si volvería a darse. Las gimnastas comentaron que pasar tiempo con los perros de terapia les ayudó a afrontar la competición estando más tranquilas y animadas. “Durante los últimos años, nuestras atletas nos han dicho constantemente que lo que les gustaría más es apoyo para la salud mental”, dijo Jill Geer, responsable de comunicación del equipo. Así se introducieron varias iniciativas y “el programa de perros de terapia es el más lindo, más alegre y más fantástico entre todos ellos”.

Perros en los Juegos Olímpicos

Después del caso de Simone Biles en Tokio 2020 y de la pandemia por COVID-19, que tuvo un impacto tan profundo en mucha gente, los equipos olímpicos estadounidenses quisieron poner más atención a la salud mental de sus atletas. Así fue como pusieron la mirada en los perros de terapia, que han acompañado a varios equipos en la preparación de los Juegos.

Es el caso de Beacon (cuyo nombre precisamente significa “modelo” o “ejemplo”) con el equipo de gimnasia artística o de las estrellas de Instragram Ellie y Emma con el equipo de fútbol. Aunque varios perros participaron en sesiones de terapia canina, Beacon se hizo especialmente popular después de que se volvieran virales sus vídeos y fotos abrazando y jugando con las atletas.

Tan popular se hizo que el equipo olímpico Gymnastics USA lo presentó oficialmente a través de sus redes sociales y le dio sus propias credenciales para que pudiese acceder a las instalaciones de las atletas, reconociendo así su papel como parte fundamental del equipo. Jill Geer, responsable de comunicación del equipo, bromeó con la verdad al decir que “Beacon necesitará un agente, porque hay más solicitudes para encontrarse con él que con cualquier atleta”.

Por desgracia, debido a problemas logísticos, Beacon no pudo viajar con el resto del equipo a París para dar apoyo a las atletas justo antes de su momento más importante; pero eso no impidió que el equipo estadounidense de gimnasia artística se alzara con el oro en la final que tuvo lugar este martes 30 de julio. Simone Biles, con su regreso a la competición, consiguió su octava medalla, convirtiéndose en la gimnasta estadounidense con más medallas olímpicas.