¿Adiós a la Fundación Gates? El cofundador de Microsoft, Bill Gates, anunció en una entrevista al diario The New York Times que echará el cierre definitivo a la Fundación Bill y Melinda Gates (que fue creada formalmente en 2000) dentro de dos décadas, el 31 de diciembre de 2045. "Hay demasiados problemas urgentes que resolver como para que pueda retener recursos que podrían usarse para ayudar a la gente. La gente dirá muchas cosas sobre mí cuando muera, pero estoy decidido a que ‘murió rico’ no sea una de ellas", decía Gates a través de un comunicado de prensa en su página web.
Y es que, más allá de su destacado papel como pionero tecnológico al frente de Microsoft, Bill Gates se ha convertido en una de las figuras empresariales más comprometidas con la filantropía. Buena parte de sus esfuerzos se canalizan a través de esta fundación, considerada hoy una de sus principales iniciativas a nivel global en materia de donaciones y acción social.
Una fortuna con fecha de caducidad
¿Y qué ocurrirá con su patrimonio, valorado en mas de 120.000 millones de dólares? Antes de que llegue esa fecha, Bill Gates no planea que dicho patrimonio lo hereden sus hijos, sino que su intención es donar la totalidad de su fortuna a causas sociales.
Durante todos estos años, la fundación ha destinado miles de millones a combatir enfermedades, mejorar la nutrición y reducir la pobreza en el mundo. Concretamente, en los últimos 25 años, la Fundación Gates ha desembolsado más de 100.000 millones de dólares para todas estas causas humanitarias. Con este nuevo compromiso, la fundación planea duplicar sus donaciones, destinando más de 200.000 millones de dólares en las próximas dos décadas.
¿Por qué Bill Gates no dejará la herencia a sus hijos?
El multimillonario distribuirá “prácticamente todo” su patrimonio antes de la disolución de su fundación el 31 de diciembre de 2045. Pero, ¿por qué no lo deja en herencia a su descendencia? En su entrevista, Gates apunta que esta decisión fue inspirada por un libro de Andrew Carnegie del siglo XIX, llamado “El evangelio de la riqueza” en el que argumenta que los ricos tienen la responsabilidad de devolver sus recursos a la sociedad.
Así, cree que las grandes fortunas son “casi ilegítimas” si no tienen un retorno hacia la sociedad y que, además, tampoco haría ningún favor a sus hijos dejándoles grandes cantidades de dinero. Al contrario, defiende que la riqueza debe gestionarse con responsabilidad y visión ética global.
El empresario expresó su intención de intensificar el ritmo de trabajo de la Fundación Gates en proyectos vinculados a la salud global y la equidad social, con la expectativa de que esta decisión inspire a otros multimillonarios a seguir un camino similar de impacto y responsabilidad.
Salud, nutrición y pobreza: los pilares de la Fundación Gates hasta su cierre
Originalmente, la Fundación Gates iba a permanecer en activo hasta el fallecimiento de la pareja filántropa, pero las consecuencias de la istración del presidente Donald Trump en Estados Unidos le han hecho cambiar de opinión y adelantar la donación y cierre de la entidad a 2045.
Según Gates, las próximas tareas en las que se centrará la fundación serán muy concretas y necesarias: erradicar enfermedades infecciosas mortales, acabar con las muertes prevenibles de madres y bebés y sacar de la pobreza a cientos de millones de personas en todo el planeta.
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